Cuando los poetas escriben sus composiciones líricas, crean una realidad particular; a través de los poemas expresan sus sentimientos u observan el mundo circundante, todo aquello que los rodea.
Pueden, por tanto, mirar dentro de sí mismos, pero también tienen la posibilidad de dirigir su mirada hacia la realidad exterior.
Pueden, por tanto, mirar dentro de sí mismos, pero también tienen la posibilidad de dirigir su mirada hacia la realidad exterior.
el contenido de los poemas
TEMAS RECURRENTES EN LA LÍRICA
el MUNDO INTERIOR
EL AMOR
Es el tema más universal, presente en todos los tiempos y en todos los autores.
Su tratamiento ha evolucionado a lo largo del tiempo. (El amor cortés, en la Edad Media; el amor platónico del Renacimiento: el amor de los Románticos... En la actualidad el amor es más cotidiano, realista y sensual.
Puede ser tratado desde múltiples puntos de vista (amor, desamor, nostalgia, soledad, angustia, miedo...).
Es el tema más universal, presente en todos los tiempos y en todos los autores.
Su tratamiento ha evolucionado a lo largo del tiempo. (El amor cortés, en la Edad Media; el amor platónico del Renacimiento: el amor de los Románticos... En la actualidad el amor es más cotidiano, realista y sensual.
Puede ser tratado desde múltiples puntos de vista (amor, desamor, nostalgia, soledad, angustia, miedo...).
Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca. Parece que los ojos se te hubieran volado y parece que un beso te cerrara la boca. Como todas las cosas están llenas de mi alma emerges de las cosas, llena del alma mía. Mariposa de sueño, te pareces a mi alma, y te pareces a la palabra melancolía. El amor |
Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo. Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza: déjame que me calle con el silencio tuyo. Déjame que te hable también con tu silencio claro como una lámpara, simple como un anillo. Eres como la noche, callada y constelada. Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo. Me gustas cuando callas porque estás como ausente. Distante y dolorosa como si hubieras muerto. Una palabra entonces, una sonrisa bastan. Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto. Es verdad
¡Ay, qué trabajo me cuesta quererte como te quiero! Por tu amor me duele el aire, el corazón y el sombrero. ¿Quién me compraría a mí este cintillo que tengo y esta tristeza de hilo blanco, para hacer pañuelos? ¡Ay, qué trabajo me cuesta quererte como te quiero! Federico García Lorca. La emoción del primer beso, el estar enamorado, las dudas, la pasión, el dolor del desengaño...
Una antología de poemas de amor donde manda la poesía y no el poeta. Porque el amor es lo importante y lo que nos hace importantes. Porque EL AMOR MUEVE EL MUNDO. |
OTRAS EXPERIENCIAS, RECUERDOS, ILUSIONES...
Aparte del sentimiento amoroso, el poeta puede mostrar sus experiencias, recuerdos, ilusiones...
MEMENTO
Cuando yo me muera,
enterradme con mi guitarra
bajo la arena.
Cuando yo me muera,
entre los naranjos
y la hierbabuena.
Cuando yo me muera,
enterradme si queréis
en una veleta.
¡Cuando yo me muera!
Federico García Lorca
Cuando yo me muera,
enterradme con mi guitarra
bajo la arena.
Cuando yo me muera,
entre los naranjos
y la hierbabuena.
Cuando yo me muera,
enterradme si queréis
en una veleta.
¡Cuando yo me muera!
Federico García Lorca
el mundo exterior
El mundo que nos rodea y las grandes preguntas que plantea su existencia.
El poeta contempla y nos muestra lo que siente ante lo que ve (el sentido de la vida, la muerte, los conflictos sociales, políticos, culturales, religiosos).
El poeta contempla y nos muestra lo que siente ante lo que ve (el sentido de la vida, la muerte, los conflictos sociales, políticos, culturales, religiosos).
SOLDADO, APRENDE A TIRAR
Soldado, aprende a tirar: Tú no me vayas a herir, que hay mucho que caminar. ¡Desde abajo has de tirar, si no me quieres herir! Abajo estoy yo contigo, soldado amigo. Abajo, codo con codo, sobre el lodo. Para abajo, no, que allí estoy yo. Soldado, aprende a tirar: Tú no me vayas a herir, que hay mucho que caminar. Nicolás Guillén |
INSOMNIO
Madrid es una ciudad de más de un millón de cadáveres (según las últimas estadísticas). A veces en la noche yo me revuelvo y me incorporo en este nicho en el que hace 45 años que me pudro, y paso largas horas oyendo gemir al huracán, o ladrar los perros, o fluir blandamente la luz de la luna. Y paso largas horas gimiendo como el huracán, ladrando como un perro enfurecido, fluyendo como la leche de la ubre caliente de una gran vaca amarilla. Y paso largas horas preguntándole a Dios, preguntándole por qué se pudre lentamente mi alma, por qué se pudren más de un millón de cadáveres en esta ciudad de Madrid, por qué mil millones de cadáveres se pudren lentamente en el mundo. Dime, ¿qué huerto quieres abonar con nuestra podredumbre? ¿Temes que se te sequen los grandes rosales del día, las tristes azucenas letales de tus noches? Dámaso Alonso |
LA VIDA Y LA MUERTE
EL VIAJE DEFINITIVO
…Y yo me iré. Y se quedarán los pájaros cantando; y se quedará mi huerto, con su verde árbol, y con su pozo blanco. Todas la tardes, el cielo será azul y plácido; y tocarán, como esta tarde están tocando, las campanas del campanario. Se morirán aquellos que me amaron; y el pueblo se hará nuevo cada año; y en el rincón aquel de mi huerto florido y encalado. Mi espíritu errará, nostálgico… Y yo me iré; y estaré solo, sin hogar, sin árbol verde, sin pozo blanco, sin cielo azul y plácido… Y se quedarán los pájaros cantando. (Juan Ramón Jiménez, Poemas agrestes, 1911) |
No a la transmigración en otra especie.
No a la post vida, ni en cielo ni en infierno. No a que me absorba cualquier divinidad. No a un más allá, ni aun siendo el paraíso reservado a islamitas, con beldades que un libro garantiza siempre vírgenes. Porque esos son los juegos para ingenuos en que mi agnosticismo nunca apuesta. Mi envite es al no ser. A lo seguro. Rechaza otro existir, tras consumida mi ración de este guiso indigerible. Otra vez, no. Una vez ya es demasiado. José María Fonollosa |
Carpe diem
CARPE DIEM (Goza de este día):
Invitación al goce de los años de juventud (= día) y al aprovechamiento del momento, antes de que el inevitable paso del tiempo nos conduzca a la vejez y a la muerte.
Invitación al goce de los años de juventud (= día) y al aprovechamiento del momento, antes de que el inevitable paso del tiempo nos conduzca a la vejez y a la muerte.
La expresión carpe diem procede de un verso que el poeta latino Horacio dedicó a su amiga Leucónoe, a quien reprocha que quiera conocer cómo será su futuro consultando a los astrólogos. Horacio le incita a disfrutar de su juventud, terminando su oda diciendo:
Dum loquimur, fogerit invida
aetas: CARPE DIEM, quam mínimum credula pastero. |
(Mientras hablamos, habrá huido celosa la edad:
¡GOZA ESTE DíA.! ada fíes del venidero.) |
COLLIGE, VIRGO, ROSAS (Coge, virgen, las rosas ...):
Carácter irrecuperable de la juventud y la belleza: invitación a gozar del amor (simbolizado en la rosa) antes de que el tiempo robe nuestros mejores años.
Carácter irrecuperable de la juventud y la belleza: invitación a gozar del amor (simbolizado en la rosa) antes de que el tiempo robe nuestros mejores años.
Niña, arranca las rosas, no esperes a mañana. Córtalas a destajo, desaforadamente, sin pararte a pensar si son malas o buenas. Que no quede ni una. Púlele los rosales que encuentres a tu paso y deja las espinas para tus compañeras de colegio. Disfruta de la luz y del oro mientras puedas y rinde tu belleza a ese dios rechoncho y melancólico que va por los jardines instilando veneno. Goza labios y lengua, machácate de gusto con quien se deje y no permitas que el otoño te pille con la piel reseca y sin un hombre (por lo menos) comiéndote las hechuras del alma. Y que la negra muerte te quite lo bailado. Luis Alberto de Cuenca (Por fuertes y fronteras, 1996) |
|
Se trata de un tópico que aparecerá una y otra vez en la poesía, pasada y actual.
Por ejemplo, los poetas españoles Garcilaso de la Vega -renacentista- y Góngora -del Barroco-, lo expresaron a su manera.
Por ejemplo, los poetas españoles Garcilaso de la Vega -renacentista- y Góngora -del Barroco-, lo expresaron a su manera.
En la primera parte del soneto de Garcilaso se hace referencia al color de la rosa en su máximo esplendor extendido al resto del cuerpo (corazón, cabello, cuello).
En tanto sea así, gozad, porque el tiempo lo cambiará y lo marchitará todo. SONETO XXIII
En tanto que de rosa y azucena se muestra la color en vuestro gesto, y que vuestro mirar ardiente, honesto, enciende al corazón y lo refrena; y en tanto que el cabello, que en la vena del oro se escogió, con vuelo presto, por el hermoso cuello blanco, enhiesto, el viento mueve, esparce y desordena; coged de vuestra alegre primavera el dulce fruto, antes que el tiempo airado cubra de nieve la hermosa cumbre. Marchitará la rosa el viento helado, todo lo mudará la edad ligera, por no hacer mudanza en su costumbre. Garcilaso de la Vega (Toledo, c. 1500 - Niza, 1536) |
El poeta cordobés, Luis de Góngora y Argote, dirá lo mismo aunque de forma retorcida.
Reparemos en el adverbio mientras, que se repite cuatro veces, formando un esquema organizativo paralelístico fácil de imitar. Es decir, mientras seas hermosa, goza, porque todo se convertirá en polvo, en nada. Mientras por competir con tu cabello
Oro bruñido al sol relumbra en vano, Mientras con menosprecio en medio el llano Mira tu blanca frente al lilio bello; Mientras a cada labio, por cogello, Siguen más ojos que al clavel temprano, Y mientras triunfa con desdén lozano Del luciente cristal tu gentil cuello, Goza cuello, cabello, labio y frente, Antes que lo que fue en tu edad dorada Oro, lilio, clavel, cristal luciente, No sólo en plata o vïola troncada Se vuelva, más tú y ello juntamente En tierra, en humo, en polvo, en sombra, en nada. También lo repetirá con cierta retranca humorística en un romance:
¡Qué se nos va la Pascua, mozas, Qué se nos va la Pascua! Por eso, mozuelas locas, Antes que la edad avara El rubio cabello de oro Convierta en luciente plata, Quered cuando sois queridas, Amad cuando sois amadas, Mirad, bobas, que detrás Se pinta la ocasión calva. ¡Qué se nos va la Pascua, mozas, Qué se nos va la Pascua! |
El tópico seguirá adelante a lo largo del tiempo y poco poetas se sustraerán a su uso.
En el S. XX, se puede encontrar en muchos poemas. He aquí varios ejemplos:
En el S. XX, se puede encontrar en muchos poemas. He aquí varios ejemplos:
Tómame ahora que aún es temprano
Y que llevo dalias nuevas en la mano. Tómame ahora que aún es sombría Esta taciturna cabellera mla. Ahora que tengo la carne olorosa y los ojos limpios y la piel de rosa. Ahora que en mis labios repica la risa Como una campana sacudida aprisa. [ ... ] Hoy, y no mds tarde. Antes que anochezca y se vuelva mustia la corola fresca. Hoy, y no mañana. 0, amante, ¿no ves Que la enredadera crecerá ciprés?. Juana de Ibarbourou Estoy vivo y toco. Toco, toco, toco. Y no, no estoy loco. Hombre, toca, toca lo que te provoca: seno, pluma, roca, pues mañana es cierto que ya estarás muerto, tieso, hinchado, yerto. Toca, toca, toca, ¡qué alegría loca! ¡Toca. Toca. Toca!. Dámaso Alonso Ten sueños altos ahora que eres joven,
pues el tiempo feroz segará pronto tus manos, y tus ojos, y tus labios. Gozarás hasta entonces de lo eterno que cabe en el transcurso de tus días. Hoy tu hermosura es casi divina. Mañana esas perlas que protegen la madrugada joven de tu pecho se abrirán al dolor o a la locura, no ahuyentarán la sombra de la muerte. Antonio Colinas |
Ámame ahora que tengo los cabellos negros
y una corona de junco y el perfume del agua y de la jara en los brazos desnudos. Ámame ahora que tengo en los ojos la suave llama de la tarde y la gracia de la sonrisa y la leve frescura de los manantiales. ¡Ámame! ¡Ahora y no mañana; ahora y no luego! Ricardo Molina Estás ya con quien quieres. Ríete y goza. Ama. Y enciéndete en la noche que ahora empieza, y entre tantos amigos (y conmigo) abre los grandes ojos a la vida con la avidez preciosa de tus años. La noche, larga, ha de acabar al alba, y vendrán escuadrones de espías con la luz, se borrarán los astros, y también el recuerdo, y la alegría acabará en su nada. Francisco Brines Y para terminar, mencionaremos este poema de Julio Mariscal que, a su manera, es una reivindicación del carpe diem.
Me decía mi madre: “Ahora los libros, que después tendrás tiempo. Ahora los libros”. Y yo guardaba el corazón sin estrenar, ileso, por teoremas y batallas. Las tres, las cuatro, las cinco en punto, la merienda: su leche con galletas. Mis hermanos mayores perdiéndose en sus cosas y el cartero de azul galoneado. Pero a las seis cruzabas tú, el crepúsculo te traía de la mano y ya Pitágoras se empolvaba en mi olvido, y ya las rosas clavadas en la página y el río como un lejano, muerto crisantemo. Eran las seis, cuando las nostalgias, cuando el andar primero de las sombras, y tú cruzabas y contigo el mundo que mi madre quería para luego, pero que yo llevaba entre los ojos... |
“Ahora querida clase, aprenderán a pensar otra vez por sí mismos, aprenderán a saborear las palabras y el lenguaje. A pesar de todo lo que les digan, las palabras y las ideas pueden cambiar el mundo (...). No leemos poesía y escribimos poesía porque es bonita, leemos y escribimos poesía porque pertenecemos a la raza humana y la raza humana está llena de pasión (...). La poesía, la belleza, el romanticismo, el amor... son las cosas que nos mantienen vivos” |
“CARPE DIEM, (...)
Aprovechad el momento chicos...
Haced que vuestra vida sea extraordinaria.”
Gauguin. Comenzó siendo un agente de bolsa de relativo éxito, pero terminó por abandonarlo todo y refugiarse en Tahití. Hablar de este pintor es hablar de la búsqueda de la belleza y del placer.
No sabemos si alguna vez la alcanzó, siempre tuvo una profunda carga de amargura que lo llevaría a una prematura muerte. Arearea
(El título es una palabra polinesia que viene a querer decir juego o pasatiempo gozoso) |
Marc Chagall. La obra de este pintor ruso-francés del siglo XX es, en su conjunto, un canto al optimismo y a la felicidad.
Sobre la ciudad
|
FALSALARMA, CARPE DIEM
|
Bien, quién sabe lo que el futuro deparará,
quién sabe... quién sabe donde estarás mañana... ay, vida solo hay una y hay que aprovecharla tú lo sabes... Es carpe diem, vive la vida sin límites, Es carpe diem, vive la vida sin límites, Es carpe diem, vive la vida sin límites, porque vida solo hay una y hay que aprovecharla lo sabes... |
HIMNO DE LA ALEGRÍA: Adaptación de la 9ª sinfonía de Beethoven
|
|
SOLO SE VIVE UNA VEZ: Gabinete Caligari
|
No quiero eternidad
solo velocidad el mas allá ya vendrá no me hago fotos ni guardo un papel de mi mi cara es mi carnet... |
Así que bésame
o bien despídete sólo una vez pero rápido que tengo prisa por si vivo la vez dos en realidad soy un cínico... Sólo se vive una vez... |
Albert Pla: Adaptación de 'Walk on the wild side' de Lou Reed
"CARPE DIEM", por Almudena Grandes
No es que no tenga temas sobre los que escribir. En realidad, lo único que sobra últimamente en España son argumentos de ficción y no ficción, casi todos, por desgracia, del género de terror. Corralito sí, corralito no, los recortes de los viernes, la prima por las nubes, la Bolsa por los suelos, la soledad del banco azul, el talento de Rato, el porvenir del Estado de las Autonomías... Y así, hasta el infinito. Podría escribir muchas columnas diferentes, todas de rabiosa actualidad. Pero la actualidad últimamente es tan efímera, que las verdades como catedrales de hoy resultarían pasado mañana delirantes ensueños de optimismo.
Por eso prefiero volver la vista atrás, hacia nuestros antepasados latinos, que para los bárbaros del Norte eran un hatajo de holgazanes hedonistas y derrochadores, ensimismados en placeres estériles, tan improductivos como la filosofía. Ellos nos lo enseñaron, disfruta del día, no desperdicies las horas de hoy, porque son únicas e irrepetibles, porque son tuyas, y cuando vuelen, no las recuperarás.
Eso es todo lo que puedo decirles hoy, carpe diem, porque ni siquiera Merkel tiene poder para arruinar la dulzura de la primavera en el sur de Europa, el aire fresco, crujiente, de estas mañanas que parecen estrenar el universo entero en cada amanecer. Disfrútenlas, salgan a la calle, siéntense al sol y resistan en el bendito nombre de la felicidad. Niéguense a acatar una angustia mucho más estéril, más improductiva que el optimista hedonismo que nos reprochan, porque los que dicen que saben, no saben nada, porque los que tenían la clave, no tienen ni puñetera idea, porque la verdad de ahora, será mentira mañana, pero el día de hoy nunca volverá. Carpe diem. Piensen en latín, porque si alguien ha sabido alguna vez lo que significa perder un imperio, fueron ellos, y sin embargo, aquí seguimos estando.
(Fuente: El País)
tempus fugit
FUGIT IRREPARABILE TEMPUS (El tiempo pasa irremediablemente):
Carácter irrecuperable del tiempo vivido: evocación de la condición fugaz de la vida humana.
Carácter irrecuperable del tiempo vivido: evocación de la condición fugaz de la vida humana.
Tempus fugit, "El tiempo vuela". Este tópico suele aparecer junto al Carpe diem, ya que hay que aprovechar el momento porque el tiempo pasa muy rápido y no se puede hacer nada contra eso.
El paso del tiempo es un hecho contra el que no se puede hacer nada. Matar el tiempo, como coloquialmente se dice, es una tontería. Pues, al final, solo nos matamos a nosotros mismos ... lentamente.
La vida es breve y el tiempo se nos escapa de entre las manos. Además, la existencia es demasiado corta y no merece la pena tomarse tantas molestias.
La vida es breve y el tiempo se nos escapa de entre las manos. Además, la existencia es demasiado corta y no merece la pena tomarse tantas molestias.
COPLAS DE DON JORGE MANRIQUE POR LA MUERTE DE SU PADRE
I
Recuerde el alma dormida, avive el seso e despierte contemplando cómo se passa la vida, cómo se viene la muerte tan callando; cuán presto se va el plazer, cómo, después de acordado, da dolor; cómo, a nuestro parescer, cualquiere tiempo passado fue mejor. |
II
Pues si vemos lo presente cómo en un punto s'es ido e acabado, si juzgamos sabiamente, daremos lo non venido por passado. Non se engañe nadi, no, pensando que ha de durar lo que espera más que duró lo que vio, pues que todo ha de passar por tal manera. |
"Ladrón del tiempo con disfraz lo llamo"
LOPE |
En reloj dando las horas
no nos las da, nos las quita: nos roba el tiempo, robándonos con él, el alma y la vida. Nos va pisando los pasos como si tuviera prisa Parece el perro del tiempo que ladra a su sombra misma. José Bergamín. La claridad Desierta. |
"Que el tiempo corre En patines, cuesta abajo
Y no tiene freno Hasta que das el golpe El tiempo vuela como Vuelan los papeles olvidados Y no para ni a beber para reponer" |
"Vemos cómo el pintor representa, desde un punto de vista surrealista, unos relojes como derritiéndose para referirse a ese desvanecimiento del tiempo. Si nos fijamos bien a la izquierda del cuadro hay un reloj cerrado en contraste con los otros abiertos, por ese deseo de parar el tiempo. Por otro lado, el reloj que está encima de esa especie de figura, representa la adhesión con el tiempo, el no poder escapar de él. Por último, algo curioso de los relojes es que cada uno es diferente y si nos fijamos, el reloj que está más próximo al cerrado marca una hora, el del árbol marca cinco minutos más tarde y el último cinco minutos más. Sin duda, el tiempo vuela en este cuadro. "
Fuente de la información iesmardearagon.es
Fuente de la información iesmardearagon.es
"La película comienza con la historia de un relojero que era ciego y le encargan un reloj muy especial para la estación de tren del pueblo. El relojero se pasa meses en la labor y cuando por fin lo acaba y lo colocan en el hall principal de la estación, descubren que las agujas van hacia atrás en vez de hacia adelante. Todos se extrañan y el relojero cuenta que su hijo había muerto en la guerra y que había construido el reloj de esa forma como una manera de volver hacia atrás y estar con su hijo de nuevo.
Esto viene enlazado con la historia de Benjamin Button que, al contrario que la naturaleza, nace viejo y poco a poco se va haciendo joven. Como vemos la película en sí es un ‘’tempus fugit’’ ya que no podemos escapar del paso del tiempo, ya que la vida es muerte y no se puede cambiar. Creo que esta película es un claro ejemplo del tópico porque en ella se muestra toda una vida hasta la muerte con la moraleja de que al final del camino todos, seas como seas, nos vamos a encontrar cara a cara con la muerte. " Fuente de la información iesmardearagon.es |
“Oh Benjamin, debemos perder a las personas que amamos,
¿De que otra manera podríamos saber que tan importante son para nosotros?”
UBI SUNT?
UBI SUNT (¿Dónde están?):
Carácter desconocido del más allá, de la otra orilla de la muerte, materializado en interrogaciones retóricas acerca del destino o paradero de grandes hombres que han muerto.
Carácter desconocido del más allá, de la otra orilla de la muerte, materializado en interrogaciones retóricas acerca del destino o paradero de grandes hombres que han muerto.
El ubi sunt podría describirse coloquialmente como un «¿qué fue de aquello tío?». y se obtiene mediante preguntas retóricas acerca del destino de las personas que nos precedieron. El ámbito de estas analogías puede referirse a fiestas a galas, amores, música, bailes. edificios, ruinas, calles. monumentos. éxito belleza y compañeros de vida.
Lo mismo que si ahora nos preguntáramos: «¿Dónde está la gloria futbolística de Pelé, de Maradona, de Di Estéfano, de Kubala ... ?». Con los años nuestros nietos dirán: «¿Dónde está la brillantez del genio futbolístico de Messi, de Ronaldo y de Iniesta? ¿A dónde se fueron? ¿Y en qué plató de televisión se marchitó la belleza de Penélope Cruz y de Antonio Banderas?».
Jorge Manrique, utilizó la fórmula del ubi sunt? en sus Coplas a la muerte de su padre:
¿Qué se hizo el rey don Juan? Los Infantes de Aragón ¿qué se hicieron? ¿Qué fue de tanto galdn, Qué de tanta invención Que truxeron? ¿Qué se hicieron las damas, Sus tocados e vestidos, Sus olores? |
Y Manuel Vázquez Montalbán, en el S. XX, en sus
Coplas a la muerte de mi tía Daniela rememora figuras históricas no ya de un modo trágico y tremebundo, sino con deje humorístico. ¿Qué se hizo de las bellas Goya Imperio Fornarina que enseñaron la expresión del amor a mi tía Daniela de don Antonio Maura ¿qué se hizo? y del Lerroux Alejandrino y qué se hizo del tigre Clemenceau de Primo De Rivera el valiente general ¿qué se hizo de tanto fantasma lejano? |
Silvio Rodríguez: ¿A dónde van?
Adónde van las palabras
que no se quedaron adónde van las miradas que un día partieron acaso flotan eternas como prisioneras de un ventarrón o se acurrucan entre las rendijas buscando calor. Acaso ruedan entre los cristales cual gotas de lluvia que quieren pasar acaso nunca vuelven a ser algo? acaso se van y adónde van adónde van? |
En que estarán convertidos
mis viejos zapatos adónde fueron a dar tantas hojas de un árbol por dónde están las angustias que desde tus ojos rodaron por mí adónde fueron mis palabras sucias de sangre de abril. Adónde van ahora mismo estos cuerpos que no pueden nunca dejar de alumbrar acaso nunca vuelven a ser algo? acaso se van y adónde van adónde van? |
Adónde va lo común
lo de todos los días el descalzarse en la puerta la mano amiga adónde va la sorpresa casi cotidiana del atardecer adónde va el mantel de la mesa el café de ayer. Adónde van los pequeños terribles encantos que tiene el hogar acaso nunca vuelven a ser algo? acaso se van y adónde van adónde van? |
"UBI SUNT? (¿DÓNDE ESTÁN?)", por Sergio Vences Fernández
"Alboreando ya el Renacimiento, retomaron los poetas europeos motivos muy recurrentes del mundo clásico. Uno, el del carpe diem (goza el momento presente), que, de los epicúreos helenos, heredó Horacio. Ejemplo del mismo podrían ser los versos de Garcilaso de la Vega: "Coged de vuestra alegre primavera/el dulce fruto, antes que el tiempo airado/cubra de nieve la hermosa cumbre".
Otro de los temas, ubi sunt? (¿dónde están?), alude a lo frágil y efímero de la existencia humana, así como a sus pompas y vanidades. Un tema que reflejaría Jorge Manrique en las Coplas a la muerte de su padre: "¿Qué se fizo el rey don Juan?/ Los infantes de Aragón/ ¿qué se ficieron?/ ¿Qué fue de tanto galán?/ ¿Qué fue de tanta invención/ como truxieron?". La respuesta más tétrica a tales preguntas bien podríamos hallarla, vencido el juvenil Renacimiento por el invernal y tridentino Barroco, en el óleo de Valdés Leal, titulado Finis gloriae mundi (Fin de la vanagloria del mundo) en el que aparece, en su sarcófago, el cadáver en putrefacción de un Papa, rodeado, eso sí, de cuantos abalorios -báculo, tiara, púrpuras- gozó en vida. "
Otro de los temas, ubi sunt? (¿dónde están?), alude a lo frágil y efímero de la existencia humana, así como a sus pompas y vanidades. Un tema que reflejaría Jorge Manrique en las Coplas a la muerte de su padre: "¿Qué se fizo el rey don Juan?/ Los infantes de Aragón/ ¿qué se ficieron?/ ¿Qué fue de tanto galán?/ ¿Qué fue de tanta invención/ como truxieron?". La respuesta más tétrica a tales preguntas bien podríamos hallarla, vencido el juvenil Renacimiento por el invernal y tridentino Barroco, en el óleo de Valdés Leal, titulado Finis gloriae mundi (Fin de la vanagloria del mundo) en el que aparece, en su sarcófago, el cadáver en putrefacción de un Papa, rodeado, eso sí, de cuantos abalorios -báculo, tiara, púrpuras- gozó en vida. "
"En la España de hoy, además del carpe diem, o del hedonismo, contra el que vociferan los purpurados, aunque sean de sus más fervientes adictos, hay un inmenso clamor, un clamor nacional que pide y exige que el Estado, teóricamente de Derecho, responda, no sólo con palabras, sino también con hechos, a la pregunta: ¿Dónde están? Sí. ¿Dónde están, dónde yacen los restos mortales de las víctimas del franquismo a las que sus hijos y nietos quieren recuperar de ignotas cunetas, de lejanos baldíos, de infames y ocultas fosas comunes, con el fin de darles una sepultura digna?
Sobre esas víctimas hubo un atroz silencio en la España de los vencedores, que aplicaron, a rajatabla, lo que el triunfante rey galo, Breno, impuso a los vencidos romanos: Vae victis (¡ay de los vencidos!). (Más tarde, con Julio César a la cabeza, los romanos harían tragar quinina a los galos). Tiempo de silencio, la genial novela de Martín Santos. De silencio, oprobio, miedo, latrocinios, humillaciones sin fin. ¡Silencio! Tal como culmina, aunque en otro contexto, La casa de Bernarda Alba, la tragedia del genial y mártir García Lorca a quien el asesino y faccioso Queipo de Llano ordenó "dar café", es decir, fusilar.
Pues los hijos y, sobre todo, los nietos de las víctimas del franquismo quieren saber -"todos los hombres tienen, por naturaleza, el deseo de saber", así se inicia la Metafísica del genial Aristóteles-, y, además, después de 72 años de silencio, exigen saber. (...)"
Fuente: www.laopinioncoruna.es
Sobre esas víctimas hubo un atroz silencio en la España de los vencedores, que aplicaron, a rajatabla, lo que el triunfante rey galo, Breno, impuso a los vencidos romanos: Vae victis (¡ay de los vencidos!). (Más tarde, con Julio César a la cabeza, los romanos harían tragar quinina a los galos). Tiempo de silencio, la genial novela de Martín Santos. De silencio, oprobio, miedo, latrocinios, humillaciones sin fin. ¡Silencio! Tal como culmina, aunque en otro contexto, La casa de Bernarda Alba, la tragedia del genial y mártir García Lorca a quien el asesino y faccioso Queipo de Llano ordenó "dar café", es decir, fusilar.
Pues los hijos y, sobre todo, los nietos de las víctimas del franquismo quieren saber -"todos los hombres tienen, por naturaleza, el deseo de saber", así se inicia la Metafísica del genial Aristóteles-, y, además, después de 72 años de silencio, exigen saber. (...)"
Fuente: www.laopinioncoruna.es
EL JUEGO
El poeta puede buscar simplemente el puro juego de palabras, de frases o sonidos.
El poema como producto lúdico.
El poema como producto lúdico.
BAILECITO DE BODAS
Por el totoral, bailan las totoras del ceremonial. Al tuturuleo que las totorea, baila el benteveo con su bentevea. ¿Quién vio al picofeo tan pavo real, entre las totoras, por el totoral? |
Clavel ni alhelí
nunca al rondaflor vieron tan señor como el benteví. Cola color sí, color no, al ojal, entre las totoras, por el totoral. Benteveo bien al tuturulú, chicoleas tú con tu ten con ten. |
¿Quién picará a quién,
al punto final, entre las totoras, por el totoral? Por el totoral, bailan las totoras del matrimonial. Rafael Alberti |
LA NATURALEZA
La contemplación del paisaje, la descripción del mismo como simple escenario o como proyección de los sentimientos del poeta, un símbolo que le ayuda a expresar sentimientos o estados de ánimo.
POR SU CAUCE OSCURO...
Por su cauce oscuro la corriente clara más que decir, cuenta más que contar, canta que tu voz aprenda de la voz del agua a cantar bajito cuando todo calla. José Bergamín. La claridad desierta |
EPITAFIOS
Yace aquí el mar. Ni él mismo supo jamás el número de olas que deshizo su sueño. Yace aquí el mar. Hubiera querido ser marino desde niño. Yace el mar. Nadie tuvo, como él, una caja clavada con estrellas. Rafael Alberti. Pleamar |
Beatus ille
BEATUS ILLE (Dichoso aquel):
Elogio de la vida campesina, rural, frente al ajetreo urbano y cortesano.
Elogio de la vida campesina, rural, frente al ajetreo urbano y cortesano.
Debido también a Horacio.
BEATUS lILE qui procul negotiis,
ut prisca gens mortalium, paterna rora bubus exercet suis solutus omni faenore neque excitatur classico miles truci neque horret iratum mare forumque uitat et superba civium potentiorum limina. |
La traducción es de Fray Luis de León:
Feliz el que, alejado de negocios, como en remoto tiempo los mortales, paternos campos con sus bueyes ara y no rinde a la usura vasallajes; Ni le despiertan los clarines bélicos Ni teme airados mares, Y evita igual del foro las intrigas Que del rico soberbio los umbrales |
Recordemos que el propio Fray Luis de León escribió una Oda a la vida retirada imitando al propio Horacio.
Qué descansada vida la del que huye del mundanal ruído, y sigue la escondida senda, por donde han ido los pocos sabios que en el mundo han sido. Que no le enturbia el pecho de los soberbios grandes el estado, ni del dorado techo se admira, fabricado del sabio Moro, en jaspe sustentado! |
El poeta Dávila, dirigiéndose al mismísimo Horacio, dice:
Dichoso aquél, Horacio, que huye del mundanal ruido (y del tráfico y del smog) y, lejos de los negocios de la poesía, se dedica (como aconseja Voltaire) a cultivar su jardín. Y a hacer el amor a una mujer callada, y a desayunar frutas con té de menta, y a practicar yoga al atardecer, y a ver, tras la ventana azul, el mar que siempre nace y nunca muere. |
Fuente de la información: A la literatura por la escritura. Victor Moreno
ACTIVIDAD 7
ABRIL
Se vistió la nieve de vagos carmines. ¿Me quieres?- me dijo ¡Te quiero!- le dije. Me besó en la boca con un beso inmenso. Abril vino al mundo y yo quedé muerto. Juan Ramón Jiménez |
CAVA MEMORIAS
La soledad es un desierto esté en litigio no tiene sombra y es puro hueso. La soledad es un oasis no hace señales pesa en la noche lo ignora todo La soledad no olvida nada cava memorias está desnuda se encierra sola Mario Benedetti |
Tenía sol, tenía
libros, libros y libros que daban a la luz cuando se abría. Flores, en medio de las explosiones. Geranios y rosales que estallaban, lo mismo que la sangre de los niños, niños descabezados que volaban hasta quedar asidos de los árboles y las rotas canales de los últimos pisos. Pero ahora... Rafael Alberti |
Rima XXXVIII. Gustavo Adolfo Becquer
¡Los suspiros son aire y van al aire! ¡Las lágrimas son agua y van al mar! Dime, mujer, cuando el amor se olvida ¿sabes tú adónde va? |
QUIERO SER ASTRONAUTA
Esteban Buñuel
LA RANA MUNDANA
La rana
no quiere su verde chaqueta; la rana prefiere vestir de etiqueta. La rana mundana se arregla despacio; |
ufana,
la rana visita palacio. Galana camina la Reina de Francia; la rana se inclina con mucha elegancia. Carlos Murciano
|